domingo, 13 de junio de 2010

Auto jaque mate


Me levante desconcertado, apresurado, y fuera de mi mismo. Vi la hora eran como las 6:11 de la tarde, me dirigí al escritorio, cogí una hoja y un lapicero, no le preste atención a nada, baje las escaleras de mi casa y me senté en la mesita de la sala.
Tenía una gran urgencia, necesitaba escribirle a ella, Alejandra, mi primer amor, mi gran amor que en ese momento no era mi enamorada; historia complicada, de esas que cometes un error y tratas de resarcirlo, de esas en las que caminas hacia un destino totalmente nublado, de esas que conoces el juego pero no tienes idea de cual será el resultado; ella era mi ex-novia y en ese momento éramos algo totalmente improvisado.
Mire por el balcón y empecé a escribirle, comencé diciendo: “me levante hace un rato del sueño mas extraño de mi vida, en el los días eran eternamente largos, el sol ya no brillaba, las nubes no dejaban de llorar, las estrellas escribían mi nombre dentro de un corazón junto a la soledad, las aves cantaban canciones tristes de Sabina, en los árboles solo quedaban flores blancas, esas que se dan cuando muere un familiar, los teléfonos habían desaparecido, las promesas ya no se cumplían y el amor solo era una partida de ajedrez en el que tu y yo jugábamos frente a frente. Tus ojos solo me revelaban frialdad y aunque tus labios me decían que me amabas, tu solo buscabas un jaque, ya no te importaba nada más.
Yo me ahogaba en la locura y dejaba de jugar, me veía como una pieza en tu tablero, yo era el rey blanco y de tu lado estaban las piezas negras semi-completas, esperando tus órdenes para atacar, querían capturarme, yo era la pieza que te faltaba”.
Termine mi carta diciéndole que no era una pieza, que no jugara conmigo.
Espere que respondiera pero obviamente ella no lo hizo, jamás me llamo pues los teléfonos habían desaparecido, el juntos para siempre se rompió junto con todas las promesas que nos hicimos y desde que se fue, en estos días eternamente largos en los que estoy acompañado de la soledad, en los que la lluvia solo me moja para que vea el cielo y las nubes solo me recuerden que ella, mi sol, ya no brillara; en el que las flores blancas me rodean como si estuviera muerto me doy cuenta que prefería ser una pieza de su tablero, yo estaba en su mundo, tal vez jugaba conmigo pero era el único lugar en el que estaba realmente vivo, su juego me hacia sentir realmente vivo.

jueves, 3 de junio de 2010

Acaricias mi ensueño

Brisa suave que adormece mis sentidos
Escalofríos llenos de alegría
Instante en que soy completamente tuyo
Sueño despierto que estoy vivo

Me paseas por el cielo de la esperanza
En alianza están tus labios y los míos
La gravedad horizontal pega nuestros cuerpos
Mi alma esta contigo

Al retorno de este viaje tus caricias
Remplazan mis ideas por sentimientos
Inmutado veo como te separas
Te miro y en silencio digo que te amo
Tus ojos me dicen que me amas
Sonrió… ya no alcanzan las palabras